Las letras dicen por si solas lo que un espíritu a veces siente...

domingo, 4 de septiembre de 2011

Zorro/a - CAMBIOS









Las personas no cambian de vida porque dejen de
fumar, de jugar, de comer o de salir, 
o porque son o no “capaces de…”

Las personas mutan realmente cuando el cambio se ve,
cuando viene desde adentro, cuando ese cambio se puede sostener
con actos válidos  que lo demuestran…

Las personas cambian cuando el dolor las ha doblado lo suficiente,
como para darse cuenta que si no mudaban de aires
su vida se transformaría en caos total…

La mutación se apodera del ser si este deja su piel vieja
por la que brilla debajo y pugna por asomar…

Entonces las mudanzas son profundos ajetreos del alma,
que lucha consigo misma por alcanzar aquello que deseó
desde lo  insondable del tiempo mismo…

Las transformaciones alcanzan logros desmesurados
cuando estamos convencidos
de lo que estamos viviendo como cambio…

Entonces…, no midas con tu vara si he cambiado o no,
no determines el cambio si hago o no tal o cual cosa,
no  condiciones,  ni  malentiendas,
ni justifiques, ni critiques…

Porque al final de los tiempos los trueques del alma 
nos serán negados
y el corazón volverá a padecerlo…




Sería algo así como: 
“El zorro pierde el pelo pero no las mañas…” 

Pero si hablamos de cambios… 
“Las personas cambian cuando pierden el pelo y las mañas…”

domingo, 28 de agosto de 2011

¿QUÉ PASÓ CON LAS LETRAS?


Se te quedaron atragantadas…
Se te borraron de golpe y a golpes…
Se tumbaron en la comisura de tus labios
y ahí permanecen sin decir…

Se te escondieron bajo la cama
de aquel hotel…
Se  te quedaron sentadas
en una silla
o chorreando por la ventanilla…
Vaya a saber…

¿Qué pasó con las letras…?

Todas ellas están, hoy,  mudas…
Permanecen sin palabras en el tiempo…
Aquietaron sus ansias de ser…
Se callaron por fin…

Ya nadie las espera
Ni las desea
Ni las sostiene…

Se hundieron en el hueco de tu pecho…


El fundamento de sangre razón y vida: todo se construye en vos. Lo que no te roza se desmorona a pedazos. (L. Peredo)


domingo, 21 de agosto de 2011

¿CULPABLE O INOCENTE?



Se te acusa de ladrona,
Superada, mala
Y grosera.
Se te acusa de cobarde
De estratega
De arrastrada…

Se te acusa de exterminadora
Mal hablada, de  gritona…
De creída…
Reclamante, como cualquiera,
Fastidiosa, traicionera…
Fabricante de toda clase
De humillaciones…

Se te acusa
de no saber
Ni averiguar…
Se te acusa
De  no querer hacerlo…

Se te acusa de libre,
dominante y dominada…

Se te acusa
de  sólo mirarte,
de pensarte,
de nombrarte…

Se te acusa de existir…
De ser, de estar…
Se te acusa y…,
de vez en cuando…,
se te olvida…



viernes, 19 de agosto de 2011

"EL OTRO YO" (El cuentómetro de Mort Cinder)

    Se trataba de un muchacho corriente: en los pantalones se le formaban rodilleras,
leía historietas, hacía ruido cuando comía, se metía los dedos en la naríz, 
roncaba en la siesta. Se llamaba Armando Corriente en todo,  
menos en una cosa: tenía Otro Yo.

     El Otro Yo usaba cierta poesía en la mirada, se enamoraba de las actrices, mentía cautelosamente, se emocionaba en los atardeceres. Al muchacho le preocupaba mucho 
su Otro Yo y le hacía sentirse incómodo frente a sus amigos. Por otra parte el Otro Yo era melancólico, y debido a ello Armando no podía ser tan vulgar como era su deseo.

     Una tarde Armando llegó cansado del trabajo, se quitó los zapatos, movió lentamente 
los dedos de los pies y encendió la radio. En la radio estaba Mozart, pero el muchacho 
se durmió. Cuando despertó el Otro Yo lloraba con desconsuelo. En el primer momento, 
el muchacho  no supo qué hacer, pero después se rehizo e insultó concienzudamente 
al Otro Yo. Este no dijo nada, pero a la mañana siguiente se había suicidado.

    Al principio la muerte del Otro Yo fue un duro golpe para el pobre  Armando,
pero enseguida pensó queahira sí podría ser enteramente vulgar. 
Ese pensamiento lo reconfortó.

    Sólo llevaba cinco días de luto, cuando salió a la calle con el propósito de lucir 
su nueva y completa vulgaridad.Desde lejos vio que se acercaban sus amigos. 
Eso le llenó de felicidad e inmediatamente estalló en risotadas. Sin embargo cuando 
pasaron junto a él, ellos no notaron su presencia. Para peor de males, 
el muchacho alcanzó a escuchar que comentaban " pobre Armando. 
Y pensar que parecía tan fuerte y saludable".

   El muchacho no tuvo más remedio que dejar de reir y, al mismo tiempo,  
sintió a la altura del esternón un ahogo que se parecía bastante a la nostalgia. 
Pero no pudo sentir auténtica melancolía, porque toda la melancolía 
se la había llevado el Otro Yo.


http://www.cuentometro.com.ar/036.htm


lunes, 15 de agosto de 2011

LA GRAN MUJER


Qué ironía de la vida… vos la gran mujer… 
y yo lo peor de todo…

Pero es inspirador saber  que he escuchado 
tanto que salió de tu boca…

Tanta carta dio donde tenía que dar… 
tanta frase mal mascada…

Si supieras,  gran señora… 
lo que tu existencia provoca…
Andarías por la vida pidiéndole perdón al más idiota…
A los conocidos con los que te cruzas a diario
Les esquivarías la mirada…

No dejarías que te vieran…,
Porque tu sola presencia 
es la nube negra sobre sus cabezas...

¿Qué se siente saber que fuiste un medio y no un fin?
Duele…, tal vez…

Y aunque hoy tus buenos recuerdos  te consuelen
Dudo que alcancen como explicación
A lo que no es…

Y aunque trates de evadirlos
Sabes que son, y que no es poco…



domingo, 31 de julio de 2011

Esa mirada…, aquel día… ¿fantasía o realidad?


Absorta en el horizonte y sin saber muy bien hacia 
dónde iba subió decidida a entregarse a esa historia, 
tejida con finos hilos de desconfianza…,
destrozando cristales, aniquilando distancias…

No puso resistencia alguna cuando lo vio.
Se  entregó blandamente a la ironía de la vida que, 
había pensado, le sonreía por fin…
Mas su alma, segura de sí, y con marcas de antiguas 
batallas duramente ganadas al destino, 
esta vez no le habló al oído…

Y aquella sucesión de hechos y palabras hizo que 
callera ante el despiadado hechizo del amor, 
que la abrazaba con calidez…

Aquel hombre-dios estaba allí,  mirándola con ternura 
y deseo…
Ese, que le hablaba al oído, que atendía su necesidad, 
estaba de pie ante sus ojos asombrados…, esperándola! 
 
Hasta podía escuchar el latido agitado 
de su corazón en vuelo…

Se dejó envolver con sus brazos firmes, 
hundiéndose en su pecho, abierto de par en par, 
sólo para ella… 

Y así, casi sin pensar, aquel día murió de gozo…


lunes, 18 de julio de 2011

Un alma...

Mientras sucumbo en esta angustia
de sentirme despreciada y despreciable,
razono la mortalidad del ser,
que escapar quiere de mi,
para perderse en una oscuridad que ya conoce...


No se oculta tras un velo aquella alma insensata
que habitase todos mis espacios...
Se deja ver impávida, inmóvil...
Aún cuando todas sus fibras gritan de dolor
aúllan de pena..., la misma que carga
desde aquella vez...


Y temblando de soledad observa como
el juego siniestro del permanecer
continúa sujetando vidas a la vida...




martes, 5 de julio de 2011

A VECES LEO..., Y LEO...,Y LEO... Entonces aparecen este tipo de escritos...

 Polémico y criticado....

Mario Vargas Llosa. Premio Nobel de Literatura 2010...(no se si es de él, pero me gustó, se los comparto)

Todas las flores del desierto están cerca de la luz.
Todas las mujeres bellas son las que yo he visto, las que andan por la calle con abrigos largos y minifaldas, las que huelen a limpio y sonríen cuando las miran. Sin medidas perfectas, sin tacones de vértigo. Las mujeres más bellas esperan el autobús de mi barrio o se compran bolsos en tiendas de saldo. Se pintan los ojos como les gusta y los labios de carmín de chino.

Las flores del desierto son las mujeres que tienen sonrisas en los ojos, que te acarician las manos cuando estás triste, que pierden las llaves al fondo del abrigo, las que cenan pizza en grupos de amigos y lloran sólo con unos pocos, las que se lavan el pelo y lo secan al viento.

Las bellezas reales son las que toman cerveza y no miden cuántas patatas han comido, las que se sientan en bancos del parque con bolsas de pipas, las que acarician con ternura a los perros que se acercan a olerlas. Las preciosas damas de chándal de domingo. Las que huelen a mora y a caramelos de regaliz.

Las mujeres hermosas no salen en revistas, las ojean en el médico, y esperan al novio, ilusionadas, con vestidos de fresas. Y se ríen libres de los chistes de la tele, y se tragan el fútbol a cambio de un beso.

Las mujeres normales derrochan belleza, no glamour, desgastan las sonrisas mirando a los ojos, y cruzan las piernas y arquean la espalda. Salen en las fotos rodeadas de gente sin retoques, riéndose a carcajadas, abrazando a los suyos con la felicidad embotellada de los grandes grupos.

Las mujeres normales son las auténticas bellezas, sin gomas ni lápices. Las flores del desierto son las que están a tu lado. Las que te aman y las que amamos. Sólo hay que saber mirar más allá del tipazo, de los ojazos, de las piernas torneadas, de los pechos de vértigo. Efímeros adornos, vestigios del tiempo, enemigos de la forma y enemigos del alma. Vértigo de divas y llanto de princesas.
La verdadera belleza está en las arrugas de la felicidad...


CELULOIDE - EL DIABLO VISTE A LA MODA


Mientras miro esta peli, un frío día de invierno que no da para 
otra cosa más que quedarse en casa, pienso en la cantidad de seres 
que, como la joven protagonista, aspiran a encontrar un trabajo como ese, 
en una empresa como esa, rodeados de gente como esa…, 
y no puedo más que pensar “pobres…”, indudablemente, 
su juicio no funciona como debería, o si…
Mimetizando toda su vida (aspecto, pensamientos, sentimientos, etc.) 
con el mundo que la rodea: ¿cuánto pierde?, ¿cuánto gana?, 
¿cuánto deja?, ¿cuánto toma?...
Las respuestas varían según sus cerebros y lo válido es que identifiquen pérdidas y ganancias en el balance de sus vidas…
Eso por un lado…
Por el otro, veo a la exitosa dueña de la empresa… 
Soberbia, con el mundo bajo sus pies, mirando todo y a todos 
desde la cumbre en la que se halla, luciendo diariamente ese aspecto 
de triunfo en su persona… Respetada y hasta temida…
Qué envidia, no?
Noooo!!!!, para nada!!! Pues ella se esconde tras una falsa fachada.
Bajo del maquillaje, los tacos altos y la ropa de primera marca oculta la frustración y la infelicidad de no ser amada, de no ser valorada…
Tal vez pueda darse más lujos que la mayoría de sus lacayos pero sabe, 
en el fondo de su corazón, que aquellos, incorruptibles de alma, 
no se dejan avasallar por los brillos de esa vida, 
y más tarde o más temprano, cuando lo notan, 
regresan a todo aquello que los mantiene vivos: sus afectos, 
amigos y a lo que alguna vez dejaron en el afán por ascender: 
su libertad de obra y pensamientos. 

Para algunos no es más que un paseo..., una vuelta por el mundo...